martes, 22 de mayo de 2012

¿QUE DEBE DE ENSEÑAR LA ESCUELA DEL SIGLO XXI?

PEDAGOGIA DE LA PREGUNTA

Interesante la discusión generada en el curso de PEYEA, saltan varias preguntas, ¿debemos de reprobar a los niños y hacer que repitan un grado para "reforzar" sus conocimientos? ¿cuáles son los retos de la escuela en el siglo XXI? ¿cuáles son las características de la enseñanza que el docente deberá de ofrecer ante estos retos? Les dejo ese artículo que me parece por demás interesate y muy apropiado para inicar esta discusión. Éxito.

24 comentarios:

Prof. Rodrigo Flores Suárez dijo...

Adriana, sí leíste el artículo que está en la entrada de la publicación?

Adriana Hernández Delgado dijo...

si Profe, y me puse a reflexionar en que lamentablemente por ser el Ineternet una herramienta muy práctica dejamos de lado todas las demas fuentes de información que tenemos a nuestro alcance. Uno de los rasgos del perfil de egreso de la educación básica es que el alumno adquiera la capacidad de buscar, seleccionar, analizar, evaluar y utilizar la información proveniente de diversas fuentes, mi trabajo entonces no sólo es que los alumnos conoscan las diferentes fuentes de información sino que hagan uso de ellas, por lo tanto tengo que propiciar esa busqueda, selección, analisis,etc. en mis clases, ademas de brindarles la oportunidad de expresar sus opiniones y preguntas y que de esta manera puedan ser personas mas reflexivas y criticas. A proposito de las preguntas, es muy comun que en las primarias con los grupos de cuarto, quinto y sexto, los alumnos se burlen de las preguntas o comentarios de algunos de sus compañeros, yo siempre hago mucho incapie en que para mi es muy importante escucharlos a todos y que no se vayan de ahi con alguna duda por temor a que los demas se rian de ellos, pues la peor preguntas, es la que no se hace. De esta manera no solo les doy confianza a los alumnos de preguntar, tambien voy trabajando el respeto a las opiniones y la tolerancia ante las diferentes maneras que tenemos de aprender.

Martín Lara Camacho dijo...

Más que enseñar a cuestionar todo lo que vemos, que también es muy bueno, la escuela del siglo XXI debe de enseñar a dar respuesta a las preguntas que surjan de nuestra interacción con el mundo y a las que se generan en nuestro interior.

La escuela del siglo XXI debe de enseñar lo que no se enseñó en los siglos pasados y lo que muy probablemente no se enseñará en el siguiente, porque lo que se enseña, o debe de enseñar, depende de las necesidades de los educandos.

Pienso que solo existe un saber o una necesidad universal, el cual consiste en saber vivir en sociedad y del cual estamos muy alejados. Y que mientras no se consiga dominar, la escuela seguirá evolucionando tratando de dar respuesta a la necesidad de sus educandos con el fin de alcanzar esta meta.

Es a través de preguntas, pero sobre todo de respuestas reflexivas, como podemos alcanzar este fin último de la educación. Es por ello que debemos de hacer un poco al lado el internet y apostar más por lo que nosotros somos capaces de generar. Internet, al igual que otros medios, es una herramienta de apoyo, pero esta, más que darnos respuestas, nos debería de generar más preguntas, las cuales cada uno de nosotros se debería de dar a la tarea de resolver.

Martín Lara Camacho

Karina Ramìrez dijo...

Deberìa enseñar, el como "aprender" a aprender, el como querer seguir aprendiendo, y no solamente crear individuos que sean activos trabajando en cualquier cosa, sino individuos sociales, con deseos de superaciòn constantes.

Carolina González dijo...

Me parece interesante aun la pregunta que se dio en clase... reprobar o no??? Considero que seria bueno no reprobar a los niños pero seria interesante que para que hubiera un avance en los niños hubiera un trabajo entre los propios docentes, es decir, una desaficionad entre el maestro a cargo y el nuevo, esto traería consigo una toma de responsabilidad, recordemos el maestro debe de estar frente a grupo por vocación asumiendo mas que nada la responsabilidad de formar mejores ciudadanos. En cuanto a la herramienta del Internet lo relaciono con el libro de texto, es bueno utilizarlo pero no abusar de su uso, ya que como lo menciona Adriana tener que desarrollar la habilidad de búsqueda en otras fuentes, si nosotros no lo hacemos los niños no tendrán ese ejemplo y por lo tanto ellos menos lo harán.Esta en nuestras manos cambiar el futuro de ellos.

Carolina González dijo...

Perdon quise decir una desicion entre el mestro a cargo y el nuevo...error de dedo jejeje

karina Ramirez dijo...

y Respecto a las caracterìsticas del buen docente; solo hay que recordar nuestro perfil de egreso, en èl, aparecen de manera general las acciones y caracterìsticas que tenemos que tener los docentes. En en cuanto a la reprobaciòn estarìa de acuerdo que fuese,en caso de que el no se viera un notable desface en la edad del alumno y si se le asignara al alumno una nueva maestra que estuviera "capacitada" e informada del rezago del alumno, de lo contrario optarìa por pasarlo de año, considerando nuevamente la idea de supervisar su desarrollo con el nuevo docente.
Aunque claro nada de lo anterior tendrìa que ser un " problema", si nosotros los docentes, tuvieramos en claro los objetivos, que promueve educaciòn,acompañados siempre el cumplimiento de nuestro perfil, al cual deberìamos de dar una ojeadita cada vez que se pueda.

Lizeth Figueroa dijo...

Si un alumno no logró lo deseado en un curso es evidente que habrá razones que nos demuestren el porqué no se realizaron. De ser asi, no se debe pensar como única opción o solución la reprobación del niño, sino buscar apoyo para que el curso siguiente pueda seguir adelante. Se debe aceptar que la “falla” no solo le corresponde al alumno, tambien el docente debe afrontar que no fue capaz de atender las necesidades, o bien, si se se hizo algo al respecto buscar ayuda externa. De igual forma, si sigue adelante el niño, no se le debe mandar sin respaldo, ya que seguiria sucediendo lo mismo, comenzandose un círculo, el cual solo lo podrá romper un maestro que en verdad se haga responsable de lo que le corresponde.
La escuela del siglo XXI debe ser capaz de promover a los alumnos, de encaminarlos al querer aprender, querer saber, a no temer al conocimiento, no temer por querer saber mas de lo que su alrededor le pide. Por eso, es importante alimentar la curiosidad que innata que ellos poseen, pero no encajonarlos en una sola herramienta al momento de indagar. El internet es muy útil, pero hay que saber utilizarlo, hay que estar preparado para todo lo que nos presenta y no confundirnos con lo que en realidad no sirve. Crear niños criticos que no dejen engañar, que no se convenzan con lo primero que se les presenta.
Lizeth Figueroa

Anónimo dijo...

Cuando estaba leyendo el artículo de pedagogía de la pregunta, no pude evitar hacer una comparación entre la escuela y los ejemplos que señala sobre el abuso del internet. Me parece que cuando en la escuela reciben educación descontextualizada a las necesidades del grupo los resultados que produce, son semejantes al ejemplo de los videojuegos: sólo son buenos para mover los dedos rápidamente, o sea, responder un examen; mientras que una escuela que centra como eje de enseñanza-aprendizaje las necesidades y características de su población estudiantil, produce mejores resultados ya que los alienta a cuestionar, indagar y reflexionar, a ser más curiosos puesto que a medida que más se sabe, más se pregunta.
El papel que el docente debe desempeñar y que siendo soñadora me gusta creer que se lleva a cabo (aunque sólo sea en un pequeño porcentaje de la totalidad de maestros a nivel nacional) es el de proporcionar situaciones a los niños en las que deban poner en juego todas sus capacidades adquiridas y pulidas para poder resolver, mediante diversos procesos, problemas extraídos de su vida cotidiana, haciendo de la escuela parte de la comunidad y no un espacio aislado paralelo a la vida “real”.
Smirna Carbajal

Michelle Duran dijo...

Quisiera compartir 2 anecdotas, una de ellas me quede con ganas de exponerla a la clase, pues iba ligado al tema, pero el tiempo nos consumio.

Durante los últimos días de mis prácticas, con un grupo de 2do grado, le pregunté a la maestra sobre algunos niños que no sabian leer y ella me respondió que esos niños ya estaban al borde de reprobar, que ya había hablado con los papás, pero que en algunos no veía ningun avance y que prefería reprobarlos para no hacerles ningun MAL, pues sabía que 3ero requería de muchas habilidades y que les iba a hacer más daño si los pasaba.

Cuando me dijo eso, me quede pensando, pues yo veía a esos niños trabajar y se apoyaban del compañero de equipo para tambien hacer su trabajo. Yo no hubiese pensando en reprobarlos y tampoco veia la situacion para ese grado y esa duda surgió de ahí ¿Cómo saber, identificar cuándo hay que reprobar a alguien, si tal vez tenga una debilidad, pero trabaja, se esfuerzo y en otras asignaturas es mejor que en esa que no es su fuerte?

La 2da anecdota, es familiar. Una sra. grande con un hijo pequeño al cuál tiene que ayudar con la tarea, pero eso hace muchooo que lo vió en la escuela que ya no lo recuerda, al escuchar el hijo esto, le dice a la mamá: Ayy mamá pues metete a google y preguntale.
Cabe mencionar que el niño tiene 5 años.

No me gusto que el artículo al final hiciera mención de los partido políticos, pero en general me gusto y me hizo recordar esa 2da anecdota. A veces para los niños-alumnos puede llegar a resultar más creíble lo que ven-leen en Internet que lo que los mismos libros, maestros o familia puede llegar a decir.

Nuestro reto será fomentar los valores, promover las habilidades de investigación y buscar las formas de siempre incluir a los padres en el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Lopez Veyna M. Carolina dijo...

Respecto al artículo de pedagogía de la pregunta, estoy conciente que el internet es una herramienta que nos permite acceder a cualquier información de manera instantánea y en la actualidad no se esta aprovechando del todo esta ventaja, por miedo a los peligros que esta conlleva. En vez de incentivar la curiosidad los niños, muchas veces se coarta su libertad de expresión por seguir un programa de estudios. La escuela debe cambiar, debe dejar de ser un lugar que espera que otros les digan que duda deben tener. Debe ser un espacio en el que los alumnos generen sus propias preguntas, reflexionen, investiguen y den respuesta a las mismas sin necesidad de agentes externos.

Reyna Karina Romero Camacho dijo...

En relación con el artículo “La pedagogía de la pregunta” yo concuerdo con el hecho de que la situación en la que nos encontramos hoy en día es muy diferente a los tiempos que el cita; antes para poder responder alguna inquietud se recurría al uso de libros elaborados por muchos profesionales y expertos en el tema. Pero también hay que ponernos a pensar en que en la sociedad no puede quedarse estancada siempre en lo mismo, cada día se descubren cosas nuevas e incluso se desmienten muchas cosas que se daban por hecho. Si la tecnología nos ha regalado una fuente más de información (muy rica) entonces tendríamos que aprovecharla al máximo pensando también que gran parte de la información que en internet se encuentra se basa en los libros de profesionales.
Sé que no toda la información que encontramos es verídica o la adecuada, sin embargo tendríamos también que aprender a no sólo basarnos en lo primero que encontramos si no desarrollar una habilidad para tratar la información que se nos está dando, discriminando aquello que podría no ser lo que necesitamos.
Lo anterior no es sencillo pero es aquí donde entramos nosotros como docentes y facilitadores para ayudar a los niños a aprender a investigar en todas las fuentes posibles que estén a su alcance pero también a ir más allá de lo primero que encuentra, analizándola y reflexionándola.
Ahora, en el caso de la cuestión de “reprobar o no”, yo en un principio creía que no tenía caso que un niño avanzara de grado (en el caso específico del primer ciclo) si no sabía leer y escribir ya que el hecho de avanzar sin haber desarrollado esas habilidades lo harían rezagarse el resto de los demás años en espera de que un profesor tuviera la paciencia de dedicarse a él y a su propio desarrollo. Sin embargo, con los puntos de vista que he escuchado de mis demás compañeros y de la situación que viví el año pasado con un grupo de segundo grado, me ha quedado más claro el hecho de que los niños tienen diferentes desarrollos y cuando menos lo piensas los niños desarrollan esas competencias por ellos mismos. Ahora bien, ¿qué pasaría si repruebas al niño y en unos meses (estando ya repitiendo el mismo año) aprende a leer?
Creo que lo importante aquí sería enfocarnos más en que el niño se desenvuelva y aprenda a desenvolverse en sociedad y me quedo con una frase que usted nos comentó en clases pasadas: “Los niños tienen 6 años para aprender a leer y escribir” y yo le agregaría que incluso más.
En cuanto a los retos que el docente del siglo XXI tiene por enfrentar creo que ya están implícitos en lo que comenté anteriormente: el maestro tendría que ayudar a los alumnos a aprender a aprender. Y con esto me refiero tanto a lo académico como la parte social en la que tendrán que desarrollarse y aprender a vivir en sociedad, lo demás ya viene por sí solo.

Karen Victorio Osoria dijo...

Considero que para reprobar a un alumno implica algo más de saber o no saber leer, creo que la decisión no debe de recaer sobre este aspecto. En ocasiones la reprobación la ven como un recurso para deshacerse de los alumnos que lamentablemente no pudieron con la lectoescritura o cualquier otra situación, pero lo que refleja esta acción es la ineficacia del docente en su labor. Recuerdo lo que se comentó de que el niño tiene 6 años o más para leer, me parece lógico pues algunos adultos aún no lo hacemos perfectamente.
La escuela debe cambiar, pues lo que un niño de hace 30 años aprendió, no es lo que necesita aprender un niño del siglo XXI. El reto de esta escuela será adentrarse en la inmensidad de recursos tecnológicos con los que se cuentan, utilizándolos como parte de nuestra práctica y como una herramienta para alcanzar los objetivos que planteamos en nuestras clases. Si bien la tecnología es una excelente herramienta, habrá que utilizarla con inteligencia, es decir, indagar, seleccionar y analizar la información que encontramos al hacer clic en una página web.

Para ello se requiere un docente capaz de adaptarse a los cambios, beneficiarse de ellos y sobre todo un maestro que siempre este buscando estrategias para mejorar su desempeño, uno que reconozca sus fallas, pero que sea capaz de corregirlos y de aceptar sugerencias de sus colegas, un maestro que este consiente de la magnitud de su profesión.

Por último, termino con una frase que siempre tengo muy presente “El error del arquitecto; se derrumba, el error del abogado; se encierra, el error del médico; se entierra, pero el error de un maestro; se multiplica”.

Gabriela Lara dijo...

En cuanto a reprobar o no reprobar a un alumno, pienso qe es una decisión que debe tomarse con mucha conciencia, reflexionar muy bien los pros y los contras. No puedo decir sí está bien que lo reprueben, pero tampoco puedo estár tan segura de que promoverlo al siguiente grado sea la mejor solución. Pienso qe son varias cosas las que están en juego para poder decidir, de igual forma, pienso que la experiencia nos irá dando la respuesta a qué hacer en estos casos.

Ahora, con respecto a el internet como nueva herramienta, pienso que sí es una gran ayuda ya que tiene mucha información que nos resulta útil, y comoda para buscar.
Pero pienso también que el internet, al igual que los libros, no sirven de nada cuando no se les sabe utilizar. Es decir, cuando solo se ve la primera página que se encuentra (en el caso de los libros cuando solo se transcribe el primer párrafo) y no se reflexiona la información, no se compara con otras busquedas, en diferentes libros o páginas de internet.
Si no se sabe buscar, seleccionar y reflexionar la información que se obtenga da lo mismo que se tengan o no libros, que se tenga o no internet.

Y pues los retos que tenemos en este siglo, es que primeramente nosotros los maestros desarrollemos nuestras habilidades para que así podamos ayudar a que los alumnos las desarrollen.

Anónimo dijo...

Juan Martín Sánchez Tirado dijo:
Estoy de acuerdo con el autor, pues pienso que formular la pregunta adecuada (esto me recuerda a “Yo, robot”) moviliza conocimientos y habilidades que implica la curiosidad innata en el ser humano por descubrir cosas nuevas y el explicar los fenómenos que ocurren a su alrededor. Pero, ojo, nuestros niños llegan a la escuela con las preguntas importantes, sin embargo, los adultos nos encargamos de frenar su imaginación y genuino interés por aprender. Tal vez ha llegado el momento de informalizar lo formal de la educación. Por otra parte, pienso que definitivamente la educación del siglo XXI no debe dejar de lado (claro está, dependiendo del contexto en el que nos encontremos) la enseñanza y el aprendizaje por medio del uso de las TICS (prrrr), ya que de hacerlo, no iríamos a la par de las nuevas sociedades. Pero, su uso debe ser bajo una visión, creo yo, de libertad y responsabilidad.
Por último, me surge esta pregunta: ¿Qué pasaría si una tormenta solar o una guerra nuclear (cruz, cruz) eliminara nuestras “tecnologías”? ¿Cómo sería la educación del siglo XXI?

Anónimo dijo...

Juan Martin Sanchez Volvió a decir:

Se me ocurre que debemos educar más en contacto con lo que sucede a nuestro alrededor, porque si no aprendemos a comprender nuestro mundo, entonces ¿qué comprenderemos?

Por último, creo que a la educación debemos liberarla.

Martha dijo...

Al leer el articulo pensé que esto ya lo sabia puesto que ya lo venia escuchando desde semestres anteriores , pero mas que saber o tener claro que debe enseñar la escuela moderna del siglo XXI, debo asumir mi papel docente y preguntarme cómo voy a lograrlo. porque es muy fácil decir que la escuela debe enseñar a los educandos a pensar,a construir su propio aprendizaje, ser críticos, autónomos, solucionar problemas, formular preguntas, buscar y seleccionar información, dialogar, etc. pero el reto esta en la acción docente teniendo claro que la escuela no debe bloquear la naturaleza de los niños, al contrario debe aprovecharla para lograr los propósitos de la educción. como menciona Manuel Perez, se trata de ''Humanizar la vida escolar, hacerla que coincida con la naturaleza humana'', aprovechar la curiosidad de los niños por aprender pero partiendo en la mayor parte posible de sus inquietudes e intereses, partiendo de su realidad.

Martha dijo...

propósitos de la educacion! (error de dedo), pero aprovecho para comentar que estoy de acuerdo con lo que dice Juan, al llegar los niños a la escuela la mayoria de los maestros se encargan de aislar los conocimientos, de mecanizarlos y es ahi donde el alumno pierde el deseo y el interes por aprender y explorar lo que hay a su alrededor, en otras palabras los maestros van extinguiendo la curiosidad de los alumnos. (esto me recuerda algunas caricaturas de Francesco Tonucci)http://enclasedecamino-materiales.blogspot.mx/2010/08/francesco-tonucci-para-la-nacion.html

Karina Leyva dijo...

No estoy de acuerdo en que se permita que los niños repitan grado.

Me atrevería a decir (excepto en casos donde los niños tienen una seria necesidad educativa especial) que la reprobación expone el poco esfuerzo que el maestro le dedicó al desarrollo optimo de su alumno, ya sea en lecto escritura, pensamiento matemático o cualquier otro campo.
Yo le apostaría a pasar de grado a aquellos alumnos que presenten algún tipo de rezago, aunque con el compromiso de apoyarlo y proporcionarle el tipo de ayuda extra de requiera.


Respecto a la escuela del siglo XXI considero que debe cambiar totalmente, ya no basta con que nos enseñe a solo a leer, escribir, sumar, restar. Sino, llevar verdaderamente la vida a la escuela, contextualizar todos los aprendizajes, encontrarles un sentido valido para la vida exterior. Que es parte de lo que se está pretendiendo con las reformas educativas, pero aunque exista la intensión, es necesario que cada maestro se fije la meta de crear en su aula un ambiente de autonomía, de olvidarse de la escuela antigua, de hacer cosas diferentes, de no centrarse en los detalles más bien en lo verdaderamente importante, que es que el alumno aprenda.

Prof. Rodrigo Flores Suárez dijo...

Excelenteeeee apreciados estudiantes, me agrada que acaloremos la discusión, YO NO ESTOY DE ACUERDO CON LA REPROBACION, la esuela debe ser un acceso no un MURO.

Manuel Arroyo :) dijo...

Buenas noches.

Me llamo mucho la atencion algo que la maestra menciono de que los examenes que se realizan para adquirir las plazas, esta mal, ya que el resultado de un examen no quiere decir la calidad de enseñar que tiene un maestro. Si el interesado en la plaza sale bien en el examen; no significa que sea el mejor maestro y viceversa.

Unknown dijo...

Cuando un alumno reprueba además de que lo estas afectando en su autoestima por repetir el año estamos evaluándolo de una manera muy estandarizada por eso no estoy de acuerdo con la reprobación y mucho menos con el repetir un grado porque ese alumno puede ser muy hábil para otras actividades y en cuanto a lo que mi compañero Manuel Arroyo comenta es cierto no porque uno sea de ´´10´´ significa que automáticamente lo hará bien, eso no nos lo garantiza, y la evaluación debe ser constante ya que el rendimiento y el conocimiento no debe ser estático sino que debe ser evolutivo.
ATTE: Alexis Galván S

jean carlo barba dijo...

ami profesor me llama la atención como existe cierto rezago hoy en dia por nuestras antiguas fuentes de informacion como el leer e indagar en los libros, la tecnologia a llegado para barrer con todo esto ya que la juventud de hoy en dia pierde por completo el interes por ella. Otro punto bastante importante es el punto acerca del examen de opocision que lo propone como el que da las plazas lo cual deberia ser un ejercicio mas complejo que un simple examen ya que el conocimiento no mide la competencia del individuo si no que el como este lo pone en practica, ser maestro no es una tarea facil y es importante darse cuenta ya que tienes en tus manos varias mentes y es posible que hasta vidas, donde es importante el curriculum de acuerdo estoy pero donde queda el niño eol porfesor de hoy en dia su maxima preocupacion es cumplir con su planeacion y dar por visto los contenidos del plan de estudios dejando al niño por un lado. En una opinion muy personal creo que la ecuela debe ser mas humanista, haceral niño protagonista de ella y el maestro actuar como un mediador de conocimiento y crear ese ambiente educativo donde el niño despierte de verdad esa ambre de conocimiento, el maestro de grupo o cualquier otro debe estar por vocacion en su salon de clases ya dejar atras a esos profesores que nadamas esperan el cheque sentado en su escritorio, quiza me escucho muy drastico pero lo que esta sociedad necesita son profesores que desquiten el cheque, que se preocupen por sus alumnos, que convivan con ellos y lo mas importante que se den cuenta que el protagonista son los niños.
`` no consideres el estudio como una obligacion, si no como una oportunidad para penetrar en el bello y maravilloso mundo del saber``
Albert Einstein.

Anónimo dijo...

Vanessa Judith Napoles:
Me pareció una conferencia muy interesante y que estaba dirigida a una maestra muy preparada pedagogicamente. una propuesta excelente a mi parecer donde ella tiene visión y proyectos para la educación, ella me hace pensar en que las cosas que están pasando en nuestro país no están muy bien y que si todos pensáramos un poco en la mejora de la educación y en que todo apoyemos. una de las cosas que me llamo la atención fue También Recibió la medalla Comenio, otorgada por el Ministerio de Educación, Juventud y Deporte de la República Checa y por la UNESCO,todo es a beneficio de nuestros niños. me gusto la conferencia aunque duro demasiado, pero valió la pena.